30/12/10

LEER O NO LEER, ESA ES LA CUESTIÓN.

Daniel Penac en su libro ”Como una novela”, dice: “El verbo leer no admite el imperativo. Aversión que comparte con algunos otros: con el verbo amar… con el verbo soñar”.

Pero cuantas veces los propios alumnos han constatado que la pereza de las primeras páginas se ha convertido en interés auténtico. O en cuántas otras han admitido que si nadie se lo exigiera no leerían nada, y que después de todo la lectura les ha gustado. 


 Hacer que la lectura no sea una tortura para gran parte de nuestros jóvenes es una de las preocupaciones que mueven, no sólo al profesorado, sino también a las familias y todas aquellas personas que tenemos relación directa con el mundo del libro. 

Si queremos tomar la temperatura de cómo anda la lectura por nuestras aulas, podemos hacer una brevísima encuesta en base a preguntas como las siguientes:
-¿Cuál es el libro de los que has leído que más te ha gustado?
- ¿Cuántos libros sueles leer cada año?
-¿En qué época lees más?
-¿Lees antes de irte a dormir?
-¿Qué libro recomendarías a tus amigos?
-¿Qué opinas de que en los centros escolares se pongan unas lecturas obligatorias?
-¿Qué es lo que más te gusta hacer en tu tiempo de ocio?

Muchas son las propuestas que, desde todos los ámbitos, se lanzan para superar el déficit lector, pero una de las que me parece más sencilla a la vez que eficaz es ponernos de ejemplo. Porque si los hijos y alumnos ven leer a sus padres y profesores, es probable que ellos también lean, por eso es tan importante la lectura en la familia desde los primeros años, momento ideal para crear el hábito de la lectura.

Por último, os dejo los derechos imprescriptibles del lector, según el ya citado Daniel Pennac, en la misma obra:
1. El derecho a no leer.
2. El derecho a saltarse las páginas.
3. El derecho a no terminar un libro.
4. El derecho a releer.
5. El derecho a leer cualquier cosa.
6. El derecho al bovarismo (enfermedad de transmisión textual)
7. El derecho a leer en cualquier lugar.
8. El derecho a hojear.
9. El derecho a leer en voz alta.
10. El derecho a callarnos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario